Bufete Álvarez Docampo
El Bufete Álvarez Docampo es un Despacho de Abogados con sede en Getafe (Madrid), con una amplia experiencia de más de 20 años en todo tipo de procedimientos de Derecho de Familia y Matrimonial:
La suspensión de la vida en común, y la disolución del régimen economico matrimonial que supone la Separación y el Divorcio, conlleva además la necesidad de adoptar las medidas relativas a la custodía de los hijos comunes, en caso de existir, estableciendo un regimen de visitas y fijando una pensión de alimentos a cargo del cónyuge no custodio, así como en su caso determinar a cual de los cónyuges atribuir la vivienda familiar, y como realizar el reparto del resto de bienes comunes. En el caso del divorcio, se produce además la extinción definitiva del vinculo matrimonial, posibilitando que los conyugues puedan contraer nuevo matrimonio.
En todos los casos, intentamos que la ruptura matrimonial se resuelva de mutuo acuerdo, de la forma más rápida y económica posible a través del denominado Divorcio Express, para intentar que el procedimiento sea lo menos traumático para todos los miembros de la familia.
Desechadas las posibilidades de acuerdo, cuando la separación o el divorcio se vuelven contenciosos, prestamos a nuestros clientes la mejor defensa posible de sus intereses ante los Tribunales.
Somos también especialistas en custodias compartidas de los hijos. En los últimos años la legislación, y sobre todo, el criterio de nuestros juzgados hace cada vez más común este tipo de custodias en el que ambos progenitores se reparten la misma por periodos de tiempo establecidos en función de los intereses del menor. De no ser posible esta medida, la custodia será para uno sólo de los padres, estableciendose en favor del otro un régimen de visitas, más o menos amplio, que garantice que este progenitor no custodio pueda mantener el contacto con sus hijos.
Otra cuestión a tener en cuenta es la contribución que cada uno de los cónyugues debe hacer al sostenimiento de la familia, lo que se conoce como pensión de alimentos, efectiva desde la separación o el divorcio hasta que los hijos alcanzan la independencia económica, y cuya cuantía se fija en atención a las necesidades del menor y a la capacidad económica del cónyugue no custodio.
También cobra importancia en estos casos la atribuición que se realiza de la vivienda familiar que fuera el domicilio conyugal, y que en la práctica se atribuye al cónyuge al que finalmente se le atribuye la custodias de los hijos para satisfacer la necesidad de vivienda de estos, así como la liquidación de los bienes comunes del matrimonio, lo cual, puede hacerse en sede judicial o notarialmente.